PARK AND GARDENS OF VERSAILLES NATIONAL ESTATE
Domain with fountains, marble or bronze statues, trellis cradles and topiaries
The success of Fouquet, Intendant of Finances, was so intolerable to Louis XIV that he decided to transform the hunting lodge into an estate worthy of him. He called upon those to whom the magnificence of Vaux was owed: the gardener Le Nôtre, the architect Le Vau and the decorator Le Brun. More than 25 years of work were necessary to shape what will become a world reference in terms of gardens, trianons, the Queen's Hamlet and the Water Theatre grove.
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Visitar los jardines de Versalles fue una experiencia maravillosa y muy recomendable para quienes disfrutan de la naturaleza, el arte y la historia. El lugar es simplemente impresionante: kilómetros de senderos perfectamente diseñados, jardines simétricos, esculturas clásicas y una gran cantidad de fuentes que, cuando están en funcionamiento, crean un espectáculo mágico.
Las fuentes no siempre están encendidas, así que conviene revisar los horarios antes de ir; normalmente las activan durante ciertos horarios en días específicos (generalmente fines de semana y algunos días entre semana en temporada alta). Verlas en funcionamiento, con la música barroca que las acompaña, es una experiencia que vale cada minuto.
Hay que tener en cuenta que los jardines son enormes, así que es importante ir preparado para caminar bastante: calzado cómodo, agua y tiempo suficiente para recorrerlos sin prisa. También hay algunas áreas con sombra ideales para descansar un rato. En uno de los jardines hay un café encantador donde se puede hacer una pausa, tomar algo fresco y disfrutar de las vistas.
A diferencia del Palacio de Versalles, para visitar los jardines no es necesario reservar con antelación, aunque la entrada es paga. Esto facilita mucho si quieres planear una visita más espontánea o si no lograste conseguir entradas para el palacio.
En resumen, los jardines de Versalles son una joya en sí mismos, no solo un complemento del palacio. Vale totalmente la pena dedicarles varias horas para disfrutarlos con calma y maravillarse con la belleza y perfección del lugar.